Mayor uso del gas natural contribuiría a cumplir más del 70% de las metas de reducción de CO2 de Chile al 2030

Mayor uso del gas natural contribuiría a cumplir más del 70% de las metas de reducción de CO2 de Chile al 2030

MAYOR USO DEL GAS NATURAL CONTRIBUIRÍA A CUMPLIR MÁS DEL 70% DE LAS METAS DE REDUCCIÓN DE CO2 DE CHILE AL 2030

En un encuentro virtual organizado por la Asociación de Gas Natural (AGN) junto a la Asociación de Industriales Antofagasta (AIA), hoy se presentó para la Región de Antofagasta y el norte del país el estudio “El rol del gas natural en la transición energética: Chile 2020-2050”, realizado por Klaus Schmidt-Hebbel y Quiroz & Asociados. El Ministro de Energía, Juan Carlos Jobet, enfatizó: “el gas tiene que jugar un rol cada día más importante en el sector industrial, reemplazando al petróleo o el carbón”.

Durante la presentación del estudio, Klaus Schmidt-Hebbel enfatizó que “mientras esperamos que tecnologías como el hidrógeno maduren, entre los años 2020 y 2050 el gas natural (GN) nos ofrece una oportunidad de reducir sustancialmente sus emisiones a partir del reemplazo de combustibles altamente contaminantes como el carbón, el FO6 y el diésel. Lo anterior, a partir de tecnologías probadas y haciendo uso de una infraestructura que ya se encuentra desplegada”. El coautor del estudio añadió también que “nuestro estudio muestra que el impacto que esta sustitución puede tener en el cumplimiento de las metas de emisiones de CO2 puede ser muy relevante, representando hasta un 73% de las reducciones comprometidas al año 2030. Todo ello, sin costos fiscal”.

Asimismo, la investigación realizada por los reconocidos economistas concluye que aumentar la participación del GN en la generación eléctrica a nivel nacional, en un escenario estático, permitiría reducir hasta en un 13% las emisiones de CO2, sin costo fiscal. Esta cifra se traduce en que se dejarían de emitir anualmente 4,1 millones de toneladas de dióxido de carbono, considerando la sustitución de carbón por GN. A esto, se suma la potencial reducción de contaminantes locales en aquellas zonas donde están ubicadas las centrales a carbón.

En esto coincide el ministro de Energía, Juan Carlos Jobet, quien señaló durante el webinar: “Tenemos el compromiso de cerrar todas las centrales a carbón al 2040, que el año pasado contribuyeron en un 40% a las emisiones, y en la medida que estas salen el rol del GN será cada día más importante. Nuestras proyecciones muestran que el GN tendrá un rol importante hasta 2050, por lo que este es un esfuerzo a largo plazo”. El titular de Energía agregó también que “el gas tiene que jugar un rol cada día más importante en el sector industrial, reemplazando al petróleo o el carbón”. 

¿Por qué el gas natural es un buen aliado?

La apuesta por el gas natural para el período de transición energética se fundamenta en las siguientes constataciones: 

  1. Emite un 50% menos CO2 que el carbón en la generación de electricidad, un 90% menos de Nox que el diésel en industria y transporte, un 99% menos de dióxido de azufre (SO2) que el Fuel Oil N°6 en el sector industrial y un 99,3% menos de MP que la leña en calefacción. 
  2. Existe una infraestructura desplegada a nivel nacional que permitiría aumentar la utilización de este energético sin mayores inversiones, con los beneficios ambientales asociados.
  3. Los precios internacionales observados consistentemente en el último tiempo indican que el gas natural es competitivo como fuente de generación de energía eléctrica, al menos en lo que a costo variable se refiere, y probablemente mejorará también su competitividad en otros usos.

 

“Entre otros positivos efectos, el reemplazo del carbón por GN permitiría reducir en un 50% las emisiones de CO2 por cada MWh de energía que genera el sistema. Con esta sustitución, el sector eléctrico en su conjunto contribuiría a resolver un 68% de la brecha que separa a Chile de la meta de emisión comprometida al año 2030”, indicó Jorge Quiroz.  

Cabe señalar también, que según el estudio de Klaus Schmidt-Hebbel, Jorge Quiroz y Felipe Givovich, en el sector industrial los aportes del GN más relevantes tienen que ver con la sustitución del diésel en los grandes camiones mineros y con una profundización del rol que puede jugar en los procesos industriales. Esto último, a partir de la sustitución de combustibles más contaminantes como el diesel y los petroleo pesados. “En estos casos, los impactos de la sustitución de combustibles contaminantes como el diésel y Fuel Oil Nº 6 se extienden también a los contaminantes locales, en especial en las emisiones de MP y NOx, que afectan directamente a la población expuesta en términos de salud y calidad de vida”, señala el informe.

El presidente ejecutivo de AGN, Carlos Cortés Simon, apuntó a que aún debe definirse si la reconversión de centrales a carbón es una alternativa económica. “Lo que sí está claro es que la generación eléctrica con gas es una solución viable y probada a los desafíos de flexibilidad y confiabilidad que la entrada de energía renovable variable establece. Aquí es importante que el regulador entregue señales adecuadas y oportunas para asegurar que esta capacidad se mantenga y se expanda según las necesidades del sistema eléctrico”, agregó. Además, señaló que “en AGN estamos convencidos de que es posible obtener importantes beneficios sociales y económicos con un mayor uso del GN, especialmente en operaciones que requieran mejorar su desempeño ambiental y en las regiones con crecientes problemas de esa naturaleza”. 

Por su parte, el presidente de la Asociación de Industriales de Antofagasta, Marko Razmilic valoró el rol del GN como una alternativa importante para la transición energética de descarbonización, ya que ofrece menos emisiones de los gases de efecto invernadero. “Vemos como fundamental para el desarrollo sustentable de la región y del país bajar la huella de carbono y el estudio de Schmidt-Hebbel y Quiroz & Asociados demuestra la potencialidad del GN, al reducir la emisión de CO2 respecto al carbón en la generación eléctrica y al uso de diesel y petróleos pesados en el sector industrial y minero, contando ya con una infraestructura que permite considerarlo como alternativa de migración de fuente energética”, finalizó.